Reseña de "La naranja mecánica", de Anthony Burgess

La naranja mecánica cuenta la historia del nadsat-adolescente Alex y sus tres drugos-amigos en un mundo de crueldad y destrucción. Alex tiene los principales atributos humanos: amor a la agresión, amor al lenguaje, amor a la belleza. Pero es joven y no ha entendido aún la verdadera importancia de la libertad, la que disfruta de un modo violento. En cierto sentido vive en el Edén, y sólo cuando cae (como en verdad le ocurre, desde una ventana) parece capaz de llegar a transformarse en un verdadero ser humano.
Los clásicos son clásicos por algo.

Anthony Burgess nos introduce en un universo que me hace acordar bastante al de Fahrenheit 451 (pueden ver mi reseña de ese libro acá). Sólo que en este universo, la crueldad y la violencia son mostradas con una crudeza espantosa. Y no es la crudeza en sí lo que espanta, sino la indiferencia, y aún más, el disfrute del narrador (que es nuestro joven y "humilde" Alex) frente al sufrimiento del otro. Acá se muestra la violencia como si fuera algo divertido, como si salir a cometer delitos altamente ultrajantes para la víctima fuese lo mismo que ir al cine o ir a tomar un helado.
Este es uno de esos libros que, a pesar de mí misma, tuve que leer después de haber visto la película. Cuando la vi tenía unos tiernos 15 años, y no tenía idea de que era una adaptación. Pero cuando lo encontré en la FILBA, tan chiquito, tan brillante y tan must have, se convirtió automáticamente en una compra obligada.

Por eso cuando empecé a leerlo, una de las primeras sorpresas que me llevé fue que Alex y sus drugos (amigos) no iban al bar lácteo Korova a beber inocente leche a modo irónico, si no que esa leche (o como Alex la llama, moloco) venía condimentada con una variedad de sustancias no precisamente legales. 

Quizá yo haya estado siendo una ilusa durante todos los años que han pasado desde que vi la película, pero lo cierto es que a partir de este punto la experiencia de la lectura comenzó a ser esencialmente diferente de la que tuve al verla.
Nuestro protagonista es Alex, un adolescente de unos 15 años, inteligente y precoz, pero sobre todo fuertemente inclinado a la violencia. En ningún momento se explica o se justifica esta inclinación, ya que por todo lo demás Alex parece un chico vivaz, inocente y culto, incluso más culto que los chicos de su edad. ¡Si hasta se muestra educadísimo cuando le conviene! Así que lo único que se me ocurre para explicar por qué ese placer y regodeo en el daño ajeno es el gusto por ello, y el aburrimiento. Incluso puede parecer que no hay ningún tipo de desarrollo en este personaje, porque hasta el final no aparece nada que lo distraiga (o que lo entretenga más) que la violencia. Y nos lo dice claramente:
Pero, hermanos, este morderse las uñas acerca de la causa de la maldad es lo que me da verdadera risa. No les preocupa saber cuál es la causa de la bondad, y entonces, ¿por qué quieren averiguar el otro asunto? Si los liudos (muchachos) son buenos es porque les gusta, y ni se me ocurriría interferir en sus placeres, así que lo mismo deberían hacer en el otro negocio. Y yo soy cliente del otro negocio.
Por otra parte, los personajes secundarios forman una especie de nube borrosa, no están para nada desarrollados, pero ni falta hace para la trama, así que no me quejo. En orden de aparición, primero tenemos a los drugos de Alex: Georgie, Pete y el Lerdo. Estos chicos parecen tener una vida parecida a la de nuestro protagonista, tienen absolutamente cero personalidad, y lo único que vemos de ellos es que les atrae la violencia y que no tienen demasiadas luces que digamos, comparados con Alex. Después aparecen pe y eme, sus padres, quienes están dibujados como personas trabajadoras, cansadas y un poco temerosas de los horrores que saben, pero no quieren reconocer, que hace su hijo. Y por último tenemos al señor P.R. Deltoid, un trabajador social que se encarga de supervisar y controlar que los adolescentes descarriados a su cargo vuelvan al cauce de la civilización. Y da un discurso bastante interesante a Alex en su primera aparición:
"Bien" dijo P. R. Deltoid, "por mi parte no es más que un modo de decir recomendarte que te cuides, pequeño Alex, pues la próxima vez, como sabes de sobra, ya no irás a la escuela correctiva. Esa vez será la cárcel, y todo mi trabajo quedará arruinado. Si no tienes consideración por tu horrible personalidad, al menos puedes tener alguna por mí, que he sudado tinta tratando de salvarte. Perdemos puntos, te lo digo en confianza, por cada joven que no recuperamos; si uno de ustedes acaba en el agujero es un fracaso para nosotros."
¿Por qué resalto esto? Porque creo que a lo largo del libro lo que se desarrolla es mucho más que las desgracias de un adolescente descarriado. Aunque desdibujados, los personajes secundarios representan figuras, componentes del sistema actual que están actuando de manera errónea para llegar a lo que quieren y pueden hacer estos chicos. Chicos como Alex, de los cuales hay millones en el mundo actual. Entonces así, podemos ver un grupo de pares que no transmite nada y unos padres (una generación entera) que no sabe cómo actuar frente a sus hijos, que no quiere aplicar castigos como los que sus padres aplicaron a ellos pero al mismo tiempo no conocen otra alternativa de crianza.

Y finalmente tenemos al Estado, lleno de operarios incompetentes, interesados en el éxito profesional e incapaces de ver, y digo ver de verdad, a las personas que tienen a su cargo. Y esto me recuerda a una frase que dijo un profe mío en la facultad: "Ni el más perfecto sistema funciona bien si sus operarios son incompetentes". ¿Quiénes son los operarios del Estado? Sus ciudadanos. ¿Quiénes son responsables entonces de que algo funcione mal? Adivinen.



Perdón, pero es necesario que lo repita: los clásicos son clásicos por algo.
Y así llegamos a la segunda parte, y con ella la introducción a lo que yo llamo el "tema" del libro, porque todo libro, por más simple o complejo que sea, tiene un tema. Eso que te deja pensando cada vez que lo dejás, eso que es el trasfondo de todo el asunto y de todos los acontecimientos que se desarrollan. En La Naranja Mecánica, el tema es el libre albedrío.

"Algunas veces no es grato ser bueno, pequeño 6655321. Ser bueno puede llegar a ser algo horrible. Y te lo digo sabiendo que quizá te parezca una afirmación muy contradictoria. Sé que esto me costará muchas noches de insomnio. ¿Qué quiere Dios? ¿El bien o que uno elija el camino del bien? Quizás el hombre que elige el mal es en cierto modo mejor que aquel a quien se le impone el bien."

Resulta que nuestro inocente y despreocupado Alex acepta someterse, sin tener la más mínima idea de lo que se trataba, al experimento Ludovico. Para los que no estén familiarizados con la psicología, les cuento que este experimento (aunque no con ese nombre, que yo sepa) fue realizado en personas reales durante la segunda guerra mundial y también mucho antes, cuando no existía todavía todo el tema de la ética en la investigación, y está basado en algo que se llama condicionamiento. Éste es un documental de la época bastante simple que explica cómo funciona, y muestra el experimento que se aplicó al pequeño Alberto, muy parecido al experimento Ludovico.



Refutaciones al conductismo aparte, este tipo de experimentos ponen en duda toda esta cuestión del libre albedrío. Y en este nudo filosófico y moral es donde queda atrapado nuestro protagonista, más como sujeto experimental que como ser humano.
El arco argumental de la historia va a tener su culminación, entonces, a partir de este nudo, y el final puede parecer insulso a los ojos de quien no haya comprendido el verdadero cauce de la trama de este libro. Porque lo que Anthony Burgess busca con su historia no es impresionar y conmover a través de la gratuita violencia y el sufrimiento humano. Lo que busca es demostrar la verdadera naturaleza de nuestra especie, dentro de la cual la capacidad de elegir es un elemento fundamental, profundo e intrínseco. Si nos quedamos sin ello, nos quedamos sin humanidad:

“(…) por definición, el ser humano está dotado de libre albedrío, y puede elegir entre el bien y el mal. Si sólo puede actuar bien o sólo puede actuar mal, no será más que una naranja mecánica, lo que quiere decir que en apariencia será un hermoso organismo con color y zumo, pero de hecho no será más que un juguete mecánico al que Dios o el Diablo (o elTodopoderoso Estado, ya que está sustituyéndolos a los dos) le darán cuerda. Es tan inhumano ser totalmente bueno como totalmente malvado. Lo importante es la elección moral. La maldad tiene que existir junto a la bondad para que pueda darse esa elección moral. La vida se sostiene gracias a la enconada oposición de entidades morales (…) Desgraciadamente hay en nosotros tanto pecado original que el mal nos parece atractivo. Destruir es más fácil y mucho más espectacular que crear.”
Como ya dije: los clásicos son clásicos por algo.

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14 comentarios

  1. Hola Sofi!
    WOW! Me gusto mucho, mucho la reseña! El motivo principal es con la profundidad que vas desarrollando diferentes puntos de la novela. Me pareció genial.
    Tengo que confesar (shame on me) que nunca vi la película y tampoco leí el libro. Pero es una historia que quiero conocer mejor. Además, tu reseña me dio todavía más ganas.
    Así que espero darle una oportunidad pronto.
    Coincido totalmente que los clásicos son clásicos por algo. Es increíble lo actuales que parecen algunos textos escritos hace tantos años.
    Vuelvo a repetir, muy buena reseña!
    Saludos

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    1. Hola Flor! Que bueno que te haya gustado! :D

      Este es un libro para leer con calma, y una vez terminado saborearlo unos días, antes de pensar qué te ha dejado. Además es bastante difícil leerlo, porque la mitad está en nadsat (que es como la jerga de Alex) así que hay que poner bastante atención y tener un lápiz a mano para anotar los significados de cada palabra, jajaja! De todos modos espero que le des una oportunidad pronto, porque es fantástico. Todavía no he vuelto a ver la película, pero cuando lo haga seguro también la reseño :D

      Un beso!

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  2. Que buena reseña y el libro me encanta! Hace un año que tengo ganas de releerlo y siempre se lo recomiendo a todo el mundo. :)

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    1. Hola Deni! El libro es genial, definitivamente! Y ni hablar de la película...

      Gracias por comentar! Un saludo!

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  3. Sin duda es uno de los clasicos a tener en cuenta y espero en un futuro poder darle una oportunidad y leerlo.
    Me gusto mucho tu reseña y como presentantes los puntos en que esta dividido el argumento de la historia.
    Que bueno que lo disfrutaras.
    Besos

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  4. Hola!
    No hay dudas que los clásicos son clásicos por algo, y a veces ese algo es el que me hace querer mantenerme alejada por temor xD
    Me cuesta muchisimo decidirme a leer un clásico y cuando lo hago, no siempre termino muy convencida.
    Pero considero que hay que leerlos en algún momento.
    Este en particular no he visto la peli tampoco pero mi novio viene insistiendo hace bastante que quiere hacerlo, así que no se si la veré primero o le daré una leída antes. Pero de una manera u otra voy a estar conociendo la historia.
    Tu reseña me dio bastante idea de lo que me voy a encontrar y me gustó la forma en que explicaste y analizaste la trama ^^
    Un beso!

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    1. Hola Gime! Es cierto, los clásicos siempre tienen algo de intimidante que nos hace mantenernos alejados... Yo creo que es cuestión de perderle el miedo y leerlo como un libro más, que puede gustarte o no, y si no te gusta, no sentirte mal por eso.

      Pero si querés leer algún clásico, te recomiendo que agarres algún autor o autora del siglo XX, porque al ser los más cercanos a nosotros en el tiempo tienen una narrativa bastante fácil y atrapante, en especial si son de habla inglesa (los franceses, rusos y gente de habla hispana gustan un poco más de enredar las cosas, jajaj)

      Gracias por comentar! Un saludo!

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  5. ¡Hola Sofi! ¡Brillante tu reseñá, me encantó leerte! Te aviso que acá tenés a una nueva seguidora de tu blog :)
    Sabés que hace mil quiero leer La naranja mecánica. Lo voy a hacer, lo tengo que hacer sí o sí, es de esos clásicos que sé que voy a amar (no como otros que son aburrídisimos).
    En fin, qué ganas me diste de ponérmelo a leer ahora.

    Un beso,
    Aylu.

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    1. Hola Aylen! La verdad es que este libro es imperdible, espero que lo leas pronto y lo disfrutes! Y no te olvides de complementar después viendo la película... aunque la hayas visto antes, verla después de leer el libro es una experiencia completamente diferente.

      Gracias por comentar! Un saludo!

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  6. Hola Sofi! A mi me sucedió distinto: tenía un amigo que ya no es más mi amigo, que me torturaba para que leyera el libro, ya que para él era como su propia biblia. Me lo prestaron y me fascinó por completo, y hasta el día de hoy siento que no sea parte de mi biblioteca. Es un libro que amé, por lo que espero que algún día ocupe el lugar que se merece entre mis estanterías. No he visto la película, principalmente porque cada vez que la veía en la televisión estaba en un horrible doblaje que me resultaba tortuoso.
    Tengo una especie de nebulosa en la cabeza sobre el libro (hace más de 10 años que lo leí), pero me acuerdo que me encantó que el autor creara un propio lenguaje, cosa que sumó muchos puntos para la ambientación de la historia. Personalmente creo que el libro muestra también, en cierta forma, una exageración de las buenas y malas conductas de los seres humanos... Como la violencia extrema se encuentra también con la bondad extrema de ayudar a un extraño (si mal no recuerdo, el esposo de la mujer que atacan en los primeros capítulos sabe darle refugio a Alex antes de reconocerlo y darse cuenta de quien era). Esos opuestos, producidos por el libre albedrío, como bien remarcas, muestran con crudeza de lo que somos capaces... Como dice la bersuit: somos lo mejor pero también lo peor; y como humanos libres tenemos que elegir que es lo que queremos ser.
    Besos!

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    1. Que genial tu comentario, pienso exactamente igual, y con el agregado de la frase de La Bersuit lo completaste, jajaj! Ciertamente, lo que hace Burgess es polarizar completamente lo malo y lo bueno para que al final el lector mismo descubra que no todo es tan blanco o negro en la vida... y que todos podemos cambiar en algún momento.

      Gracias por comentar, un saludo!

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  7. Hola! Sobre este libro me hablaron maravillas, fui decidido a comprarlo y salí con "un monstruo viene a verme" y todos los días me arrepiento de ellos, pero pronto lo voy a comprar y leerlo de una buena vez, gracias por la reseña tan completa sin contarnos todo el libro y los gif que son un complemento visual muy lindo, saludos!

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    1. Jajajaja la edición que yo me compré de este libro es hermosa (es la de la foto), no se si yo la habría cambiado por Un monstruo viene a verme... Si lo leés espero que lo disfrutes, tiene mucha profundidad para leerlo con detenimiento y aprender cosas nuevas :D

      Un saludo, y gracias por tu comentario!

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